En una época en la que la humanidad estaba organizada matriarcalmente y se veneraba el poder de dar vida como el mayor tesoro del mundo en una época en la que probablemente la danza , la música y los cuentos y leyendas servían al pueblo para transmitir el conocimiento y las antiguas enseñanzas .
Por Moira (Karinae Tribal Troupe).
La danza de los siete velos es una de las danzas mas místicas, realmente no hay documentación escrita pero los haquim árabes y la medicina espagírica o alquímica dan una serie de pistas y abre toda una teoría : La entrega de dones ritualizada en la gestación y el nacimiento a la nueva vida.
LAS TRES FASES DE LA MUJER.
La triple diosa. La Diosa, a la vez que representa el carácter femenino de la creación, también representa los estados de la vida.
Doncella blanca: La luna creciente la inocencia de espíritu puro. Su estación regente es la primavera, donde se reincida el ciclo dando lugar al renacimiento de la vida.
Reproductora Roja: La luna llena la guerrera la espiral de la vida. Su estación regente es el verano y el inicio del otoño, cuando es época de cosecha, cuando la tierra da sus frutos.
Anciana Negra: La luna decreciente la copa de la sabiduría. Su estación regente es el final del otoño y el invierno, cuando las hojas caen y el frío inunda la tierra.
LA DANZA DE LOS SIETE VELOS
En el mar de Nun, el mar de las posibilidades donde se encuentran todas las almas que esperan a regresar a la tierra en el circulo de la coagulación y disolución de la vida, son los peces-almas. En el momento de la concepción, el alma del futuro bebé es llamada a la tierra y transformada en un escarabajo verde brillante que emprende su viaje desde el mar de Nun hasta la tierra. Este viajero escarabajo verde es enviado a través de las 7 puertas de la vida para nacer como ser humano la tierra.
Cuenta la leyenda que un Escarabajo verde, el Jeper venido del mar, de las posibilidades de Nun por el que ha viajado durante 120 años alrededor del sol, es llamado para reencarnarse en una vida humana durante 10 lunas. En 280 días pasa por los 7 umbrales o puertas de los Yins, genios cósmicos, en las cuales le son ofrecidos unos dones y virtudes que necesitará para tener una vida consciente y llena de equilibrio en la tierra.
Es en este preciso momento, en estos ritos, donde nace la danza mágica de los 7 velos…. la danza de la vida y la muerte, del nacer y renacer en el círculo de la vida eterna.
Isis, la gran diosa madre alada y gestante, realiza los rituales mágicos y danza recuperando de las esferas celestes los 7 velos de luz para otorgar a su futuro hijo, Horus, los 7 dones y virtudes que le serán regalados por los guardianes de los umbrales o puertas de la vida y harán de el un ser completo .
La primera puerta y más lejana que tiene que atravesar es El Umbral de Saturno, Ash-Samhuris, el Desafortunado. El velo azul con perfumes rituales de mandrágora que está a los pies de la madre, otorgará el don de la templanza y el sentimiento de la calma .
Color: Azul
Metal: Plomo
Signatura: Mandrágora
Órgano: Bazo, medula ósea
Tejido: Esqueleto
Elemento: Tierra
Temperamento: Nervioso
Entrada: Oído Izquierdo
Don: Templanza
Sentimiento: Calma
Zona: Pies
La segunda puerta: El Umbral de Júpiter, Al-Maynum, el Afortunado. El velo amarillo con perfumes rituales de laurel y muérdago que está sujeto por los brazos, le otorgará el don de la paciencia y el sentimiento de la alegría .
Color: Amarillo
Metal: Estaño
Signatura: Laurel, muérdago
Órgano: páncreas Hígado
Tejido: Cartílagos
Elemento: Aire
Temperamento: Sanguíneo
Entrada: oído derecho
Don: Paciencia
Sentimiento: Alegría
Zona: Brazos
La tercera puerta: El Umbral de Marte, Al-Ahmar, el Rojo. El velo rojo con perfumes rituales de pimienta y ajenjo, sujeto en la cadera. Al entregarlo se otorga el don de la diligencia y el sentimiento de la pasión.
Color: Rojo
Metal: Hierro
Signatura: Pimienta, ajenjo
Órgano: Sangre, vesicular biliar
Tejido: Músculos
Elemento: Fuego-Aire
Temperamento: Bilio-sanguíneo
Entrada: nariz izquierda
Don: Diligencia
Sentimiento: Pasión
Zona: Cadera
La cuarta puerta: El Umbral del Sol, Al-Madhâb, el Dorado. El velo naranja con perfumes rituales de romero y naranjo, sujeto en el corazón, otorga el don de la generosidad y el sentimiento de la felicidad.
Color: Naranja
Metal: Oro
Signatura: Girasol , romero , naranjo.
Órgano: Corazón
Tejido: Arterias , Corazón.
Elemento: Fuego
Temperamento: Bilioso
Entrada: Ojo derecho
Don: Generosidad
Sentimiento: Felicidad
Zona: Corazón
La quinta puerta: El Umbral de Venus, Al-Burqân, el Relámpago. El velo verde con perfumes rituales de cilantro, sujeto en el bajo vientre, otorga el don de la proliferación y el sentimiento de la caridad.
Color: Verde
Metal: Cobre
Signatura: Cilantro
Órgano: Riñones , piel, genitales.
Tejido: Venas
Elemento: Agua – Tierra
Temperamento: Linfo- nervioso
Entrada: nariz derecha
Don: Caridad
Sentimiento: Proliferación
Zona: Sexo
La sexta puerta: El Umbral de Mercurio, Al-Marra, el que Pasa. El velo índigo con perfumes rituales de anís e hinojo, sujeto en los pulmones, otorga el don de la humildad y el sentimiento de la comunicación.
Color: Índigo
Metal: Mercurio
Signatura: Anís, hinojo, perejil
Órgano: Pulmones
Tejido: Nervios
Elemento: Fuego-Tierra
Temperamento: Bilio-nervioso
Entrada: Boca
Don: Humildad
Sentimiento: Comunicación
Zona: Boca
La séptima Puerta El Umbral de la Luna, Al-Bad, el Blanco. El velo lila con perfumes rituales de opio y tilo, sujeto en la cabeza, otorga el don de la castidad y el sentimiento de la creatividad.
Color: Lila
Metal: Plata
Signatura: Adormidera, opio, tilo, avena.
Órgano: Cerebro , órgano reproductor , linfa.
Tejido: Ganglios
Elemento: Agua
Temperamento: Linfático
Entrada: Ojo izquierdo
Don: Fidelidad
Sentimiento: Creatividad
Zona: Cabeza
Con esta información del color del velo, la esencia o perfume del mismo, el lugar donde debe ir colocado, el don que ofrece en cada esfera la virtud que representa, etc… llegamos a una danza ritual y mística llena de simbolismo y fuerza, representando la coagulación cósmica de la vida en el ser humano. Cada velo es una ofrenda al futuro ser y, una vez finalizada la danza y ofrecidos los velos de luz, la madre gestante está preparada para dar a luz a su hijo en la oscuridad de la tierra y que éste ilumine la vida con su nacimiento.