Quien conoce este país, podrá recordar sus paisajes, escenarios y olores tan peculiares al escuchar los cinco primeros temas que componen este disco.En cuanto al último tema que da nombre al disco, es una muestra de la riqueza de la interpretación instrumental de la música árabe y de las posibilidades extraordinarias que esta última ofrece para fusionar con otros géneros musicales, en este caso la Samba latina.
Todas las composiciones son originales y compuestas por Moddathir Aboul Wafa.
Mawkeb El Nagham (Procesión de melodías) representa en la imaginación del autor la salida de una procesión real. Las lujosas melodías acompañadas por elegantes y complicados ritmos relevan la majestuosidad de la procesión, que celebra la grandeza del rey, el laúd.
El Leil wel Nil (La Noche y el Nilo) refleja el sentimiento de un paseante que se asoma a la orilla del Nilo para admirar la serenidad de la noche egipcia y posteriormente, la emoción que le embarga ante la contemplación de los diferentes escenarios que recorre.
El Qaheyra El Adima (El Viejo Cairo), nombre del barrio donde nació y creció el autor, recrea la escena de una boda tal y como se sigue festejando hoy en día en los barrios más populares de la ciudad. Como diría un conocido escritor egipcio, todos somos “hijos de nuestro barrio”. Se mezclan en esta música tanto el buen humor como la melancolía, sentimientos inseparables en al alma de los egipcios.
Fi Samaa Al-Musika (En el cielo de la música) expresa la sensación de liberación y el dejarse llevar por la experiencia de la libertad sin límites, lejos de un ambiente fijo que produce aburrimiento. Desde el punto de vista del autor, la composición refleja la evolución artística que ha experimentado Egipto hasta alcanzar su máximo esplendor a mediados del siglo veinte.
Samaa Hos (Concéntrate y escucha) celebra la complicidad entre los músicos que tocan juntos, ingrediente esencial para que surja el arte. Es entonces, en ese momento mágico, cuando el “duende” recorre el cuerpo de los artistas y el espectador se recoge y escucha para poder sentir la magia de la musica que le hechiza.
Para acabar con alegría, Samba Toola nos vincula de forma directa con el espíritu de la Samba y el Jazz. Compuso esta obra mientras jugaba y bailaba con su hija de tres años Toola; reflejando en la música la alegría de la niña.